viernes, septiembre 09, 2011

Esperar

Kim JaeJoong.
 

He pensado en escribirte durante mucho tiempo, muchísimo más de lo alguna vez pensé que podría tardarme en decidir
algo, y ni siquiera sé si seré capaz de enviarte esta carta.

Porque si llega a tus manos, será porque ChangMin la halló y la envió sin mi consentimiento.

Debes odiarme.

No fui capaz de defenderlos en su momento, deje que las cosas tomaran su rumbo sin darles yo una dirección fija.

Permití que muchos creyeran al malo de la historia a alguno de nosotros, en especial a ustedes.

Porque la SM dijo lo que le convenía y lo sé, pero fui yo el que no estuvo para protegerlos.

Aún recuerdo el día en que los tres, JunSu, YooChun y tú, me contaron que dejarían la empresa, que estaban hartos,
que ya no podían seguir de aquella manera. Pero sobre todo, recuerdo cuando nos pidieron irnos juntos.

Seguir siendo lo que éramos, sólo que en otra parte, en otro exterior.

Seguir siendo la esencia de DBSK, aunque quizá ya no con el nombre de DBSK.

Seguir cantando juntos, seguir riendo juntos.

Pero no.

Algo salió mal.

Lo supe cuando ChangMin me jaló del brazo argumentando que nunca nos iríamos.

¿Desde cuando formaba yo parte del "iríamos"?

Pero el pequeño del grupo tenía razón, yo no me iría.

Porque por muy mala que parezca SM, yo empecé allí, comencé a caminar, tropecé, me lastime, hasta que al final corrí.

Y corrí con ustedes.

Sin parar aunque nuestras respiraciones ya no dieran para más.

Lo hice y no sabes cuando dejaría por seguir haciéndolo.

Ahora ya no somos cinco, no somos ni la sombra de lo que fuimos.

Porque por muy buenos que seamos tal cual estamos, nunca llegaremos ni a rozar lo que antes teníamos.

Te amo Boo, pero no estoy seguro de poder abandonar todo por el deseo.

Llegó el momento de afrontarlo todo, los conciertos, las entrevistas, los viajes sin ustedes.

Me desmorone la primera vez que vi el avión particular tan vacío, tan callado.

Sin los estresantes gritos de delfín que daba JunSu, sin la colmena llena de miel que se formaba alrededor del YooSu.

Sin las estrambóticas cremas que hacían parecer el rostro de YooChun un pedazo de pastel con exagerado chantillí.

Sin ti preguntando si podríamos parar en la próxima estética, porque se había agotado tu fijador.

Sin las risas sinceras que el delfín provocaba con sus bromas únicamente a YooChun, sin ChangMin diciéndole que se
callara y contigo simplemente riéndote de ellos.

De ellos, sin ti.

Sin ellos, contigo.

No necesito ponerme a pensar en esto apropósito, pienso en esto todo el tiempo.

Recuerdo que los tuve cuando voy al baño a cualquier hora y esta disponible.

Lo sé cuando extiendo mis piernas en diagonal en la cama y nadie se queja de mi particular manía.

Me percató a cada momento, de que me faltan tres cosas para estar bien.

Sin embargo, una es la que me propicio un vicio, uno grande que nunca podre dejar atrás.

Tú, Boo...

Porque sé que jamás podré acostumbrarme a la soledad que tan sólo faltando tú se forma.

Jamás podré concebir el que estemos tan separados amándonos tanto.

Tu fama y la mía nunca serán efímeras, nunca se irán, y eso lo agradezco pero, si es eso lo que impide juntar nuestras
manos, la tiraría a la basura junto con todo el sufrimiento que te he causado.

YooChun esta bien, JunSu esta bien.

Porque están juntos.

ChangMin también lo esta, es un chico fuerte y aquí estoy yo para cuidarlo, cómo un padre cuyo papel nunca abandone
incluso desperdigado el grupo.

Pero tú.

¿Que ocurre contigo Boo?

Yo estoy bien sufriendo, alguna vez fui el líder y prefiero cargar con todo el dolor yo solo, aunque sé que nunca podría
ser así.

ChangMin me tiene a mí pero yo no tengo a nadie.

Y estoy bien.

Pero tú no Boo, yo era y siempre seré para ti.

Sin embargo no puedes tenerme ahora, no puedo limpiar tus lágrimas y ni siquiera besar tu frente.

¿De que te sirvo?

Sé que cuando nos separamos me dijiste que esperarías, cuanto fuera necesario hasta que todos volviéramos a ser uno.

Y tú y yo pudiéramos volver a estar juntos.

Lo dijiste así, sonriendo y llorando al mismo tiempo.

Yo no dije nada, no sabía que.

Pero te abrace cuando te recargaste sobre mí y tomaste eso
cómo si aceptara.

Cómo si aceptara el esperar aquel tiempo indefinido que aún no llega y no se si lo hará.

Boo, ¿podrías olvidarlo?

¿Podrías olvidar lo que hice?

¿Podrías por favor deshacerte de los recuerdos que me muestran diciéndote que estaba bien esperar?

¿Podrías?

Por favor.

Ya no quiero pensar que estás sufriendo solo, porque sé que es así.

No se lo dices ni a JunSu ni a YooChun, y no hay nadie más cercano allí para ti.

Perdóname por no estar allí, mas tú sabes cuanto quisiera poder seguir conservando tu corazón cálido.

Lo siento.
 

Busca a alguien más, siendo como eres es fácil enamorarse.

De verdad, pues yo más que nadie estoy seguro de ello.

Olvida lo que dije y aquello que tienes tatuado en una parte de tu cuerpo.

Olvídalo amor y...

Ama.

Porque te lo mereces.

No quiero que tus lágrimas sean de nuevo acalladas por tus manos.

Porque quizá alguien que no sabes esta esperando el permiso para hacerlo por ti.

Esperando algo que quizá nunca llegue, mereces dejarlo a un lado y ya no sufrir calladamente.

Te diría lo que siento pero se que eso será un impedimento para hacer lo que te pido así que, Kim JaeJoong volveremos
a ser el grupo que fuimos en su momento.

No sé cuando ni el porque, o si aún podremos masticar con nuestros dientes cuando ocurra pero, lo hará.

Ocurrirá.

Y por tu hermosura que así será.

Y si me permites, contradiciendo lo que escribí hace un momento, me permitiré hacer algo que no es correcto en ninguna circunstancia siendo lo que somos, en la situación en la que estamos.

Te amo y siempre, sin importar el que, será así.

Jung YunHo.













Apenas bajó la carta ahogó un sollozo.

Desde que la recibió no había parado de llorar.

Ese hombre, era tan predecible.

Cuando supo que era de él sabia lo que decía, cada palabra, cada petición.

Y aquella que sabía que no aceptaría se hacia dolorosa.

YunHo sabía el cuanto lo amaba y cómo era así también debería estar seguro de que no lo haría.

No tenía ni que pensarlo.

Porque sin importar cuantas veces llorara solo en su cuarto, sabía que aquellas lágrimas que le dolían y teñían su bello
rostro de rojo y negro al mismo tiempo, valían por todo lo que tendría pasado el tiempo.

Porque no había otra manera, volverían a lo de antes.

El momento del ahora sólo era lo que tenía que aguantar antes de tener a su Yunnie de nuevo, y sentirlo hasta el punto
de no poder sentir nada más.

YooChun, JunSu, ChangMin.

Todos estarían riendo de nuevo juntos algún día, esa era una certeza.

Por mucho que le doliera el pecho en ese momento, aún podía asegurarlo.

—YunHo...—estrujó la arrugada hoja que yacía mojada debido a su llanto.

Mas supo desde que la tocó, que unas lágrimas ajenas a las suyas ya habían sido derramadas sobre ella.

Por él, por sí mismo, debía ser fuerte.

—Te amo YunHo...
 

Porque el amor no es ningún contrato que pueda romperse, sino un tatuaje que solo puede lamerse cuando duele, esperando a quien puede reforzarlo. Siempre esperando.
 

Sin importar cuanto.

3 comentarios:

  1. Qué hermoso finc... realmente hermoso, me hiciste llorar... además del hecho que estoy escuchando cantar a Jae...
    Felicidades

    ResponderEliminar
  2. en verdad cada palabra que decia esa carta me causo gran nostalgia y tristeza el pensar como los chicos tuvieron que separarse de sus compañeros los cuales con fuerza, empeño,amor y dedicacion habian logrado salir adelante y ser una de las mejores bandas, me dolio la separacion del yunjae, pero tengo la esperanza que algun dia vuelvan a estar juntos no se como ni porque; pero en fin creo que es el sueño de cualquier cassiopeia y ojala se cumpla ese sueño y los podamos ver de nuevo juntos, unnie me gusto mucho, gracias :)

    ResponderEliminar
  3. T^T .. Triste .. Triste .. TRISTE .. Es que no pueden estar juntos .. T^T

    ResponderEliminar